Un fin de semana, mientras todos se divierten a su manera. Yo, sentado en mi cuarto hago mi autónoma fiesta, donde mis acompañantes son: cigarros, un licor aperitivo a mi alcance, mi guitarra, la radio, una luz tenue y el invitado especial, el de honor; el que hace propicio toda esta pequeña reunión. Mis oídos escuchan y se deleitan con un manjar, un tesoro, el disco que particularmente es uno de los mejores del rock and blues con psicodelia saltante. Uno de los álbumes más conocidos y comentados. “DISRAELI GEARS “.La flor y la crema innata del blues y del jazz, este tridente británico magnifico: Eric Clapton, Jack Bruce y Ginger Baker el poderoso trío power “CREAM”, proporciona este álbum de asombro y de esencia pura. Incluyen 11 temas para una gran huida del tan sofocado mundo actual. Ideal para una catarsis profunda y sacar a flote un surrealismo impensado. Fue publicado en el año 1967, un disco innovador, me atrevo a decir que hasta revolucionario, ya que la trascendencia de este disco es notable, luego de que Hendrix capitaneaba en Londres con el Are You Experienced? La polarización entre Beatles y Stones aun seguía marcada. Este disco fue un ingrediente especial para la consolidación de un grupo haciéndose llamar CREAM, la nueva corriente y sonido del rock. Cuyos integrantes ya eran ases de la música. Se juntaron para dejar generar sonidos destacados y de excelencia.
Me dispongo a colocar a mi invitado especial, encontrado en mi armario, en la radio, a un volumen frenético. Simplemente al ver la portada del álbum podrás identificar una explosión de formas extrañas y un colorido fosforescente bien marcado que anticipan mucho de lo que hallarás. Esta portada fue creado por Martin Sharp un artista australiano especializado en psicodelia. Hace de esta un diseño único. Una atmósfera y ambiente de la época psicodélica.
Subo el volumen de mi equipo. La noche comenzaba a ser mía. Presiono “play” y la primera pieza comienza a retumbar mis oídos. “Strange Brew”, un relax total, incitante a estar bajo el efecto de una sustancia alucinógena, con piques de guitarra y una melosa y falsete voz de Eric Clapton. Un acompañamiento unísono de bajo y batería, es el impactante inicio del disco. Es Cream. Es rock and blues psicodélico. Es música. Seguidamente, un estribillo andante. Un riff que junto a Smoke on the water, es uno que a todo músico se le viene a la cabeza y esta deseoso de poder hacer un “jam”. Es una obra magistral, “Sunshine of your love”. El virtuosismo de estos tres grandes hacen de esta canción un tema estupendo, una pieza de mucho valor .En pocas palabras:”LA” canción.
Mi cuarto es una humareda total. Luego de una exaltación grandiosa. Llega el momento espacial con “World of Pain“. Una canción que me agrada muchísimo por el corte y ritmo que presenta. El falsete de voz de Bruce y, Clapton siguiéndolo en los coros. Verdaderamente una melodía creativa y pegadiza que junto a “Dance the night away”, la atmósfera del disco va creciendo. Capturando una sensación inefable. Y poco a poco abro más las ventanas, para que el humo también flote hacia otros rumbos.
Es posible que esto pueda pasar, sin necesidad de gastar dinero, ni salir de casa, ni planear nada. Mi noche esta siendo mágica, es mía, una magnífica conexión con música.
La pista 5 “Blue Condition”, la introducción me traslada a épocas de antaño. Donde el blusero negro con guitarra en mano comienza hacer uso de su ingenio, de su improvisación. Pero esta canción solo queda ahí, un blues sin tanta variación con una simple monotonía que hasta pueda llegar a producir somnolencia, no es tan impactante es muy lineal. El delirio mitológico y sensación oscura, se traduce a “Tales of Brave Ullises”. Redobles de batería precisos y geniales, con un sonido de wah wah enriquecedor. Distingo una pequeña similitud con “White Room” (tema del mismo grupo, pero del álbum “Wheels of fire”)
Continua “Slawbr”, la guitarra es riquísima cuando genera esos pequeños cortes y piques y el comienzo es un enlace de buen rock. Jack Bruce con un acompañamiento que solo es característico de él. Un blues psicodélico puro. Esta canción es otra maravilla del disco.
Luego viene “Were Going Wrong” es una canción amortiguadora, escúchenla y sabrán. Deja una sensación inexplicable. Es hipnotizante. Y el final ni que decir una especie de anticipo de algo fuerte, algo brutal.
El cover llega con “Outside Woman Blues” CREAM trasforma la canción del blusero Blind Joey Reynolds, un buen riff, un tema que gusta mucho, incita al movimiento desenfrenado. Seguidamente esta Take it Back, una canción festiva, con harmónica vibrante que dan ganas de estar en el lejano oeste en un cabaña junto a un buen vino que tomar y, más….Hasta ese momento mi estado estaba por las nubes, en un delirio. No hablo de la última canción ya que pienso es un simple relleno de voces acapella y a mi modesto criterio no encaja con el furor del disco en si. Mala terminación,pero ella no estropea mi noche.
No seré un crítico musical, ni un especialista en el tema. Particularmente este material hizo que traslade toda una noche gloriosa a modestos textos y párrafos referentes a él. Nadie me quita el hecho de que bajo mi propio régimen esa noche disfrute y gocé de música, muy buena música. Ingresé en un gran sueño de acordes y melodías vibrantes. Me elevé. Gracias CREAM.
